La Oncología Radioterápica es una especialidad médica destinada al cuidado de los pacientes que se les administra Radioterapia como parte de su tratamiento integral contra el cáncer. El 60% de los pacientes diagnosticados de cáncer recibirá en algún momento de su enfermedad este tipo de tratamiento, y constituye el segundo tratamiento curativo detrás de la cirugía con cifras que alcanzan un 40%.

Es cierto que el uso de radiaciones ionizantes históricamente ha causado muchos miedos y temores a la población, pero también existe una clara evidencia que las radiaciones en condiciones de seguridad producen la destrucción de células tumorales con buenos resultados.

Existen numerosas situaciones que requieren la prescripción de la radioterapia. Lo más frecuente es dar radioterapia después de la extirpación del tumor para disminuir la probabilidad de recaída. No obstante, también se utiliza como tratamiento complementario y en combinación de otras terapias como la quimioterapia/inmunoterapia. E incluso puede indicarse la radioterapia para el control de síntomas como el dolor, sangrado u otras complicaciones que alteran la calidad de vida de nuestros pacientes.

En los casos que está indicado el tratamiento con Radioterapia, el paciente es valorado por un Radio-oncólogo quien tras examinar todas las pruebas le detalla al paciente cuál es la opción más adecuada en función de su tumor, localización o características.

Posteriormente se necesita “localizar” la zona que requiere ser tratada para lo cual se realiza una Tomografía (TAC) cuyas imágenes son la base que permite delimitar las lesiones, las zonas de riesgo y sobretodo evitar irradiar aquellos órganos sanos. Tras un complejo trabajo de diseño del tratamiento, se realizan una serie de cálculos que garantizan de forma precisa y segura que las dosis pautadas se administran adecuadamente en cada una de las sesiones de tratamiento.

Una vez realizadas todas las comprobaciones se lleva a cabo el inicio del tratamiento. Se trata de sesiones diarias de lunes a viernes, de unos 10-15 minutos de duración. La salas de tratamientos son búnkeres donde se encuentran las máquinas llamadas Aceleradores Lineales. En ellas los pacientes permanecen durante la sesión solos, pero vigilados por cámaras y voz de los profesionales a su cuidado.

Es un tratamiento mayoritariamente ambulatorio, en el que una vez finalizada la sesión se puede llevar a cabo una vida normal (salir, pasear, estar cerca de la familia, niños pequeños…). La duración total del tratamiento oscila entre 1 semana y 6 semanas, periodo durante el cual existe un control semanal de la evolución del tratamiento de un forma integral y cercana.

Gracias a la mejora tecnología de los equipos en los últimos años por iniciativas como la Donación de tecnología por la Fundación Amancio Ortega, disponemos en la actualidad de unos equipos que permiten tratamientos de altísima precisión , disminuyendo el tiempo de las sesiones, la duración de los tratamientos y los efectos secundarios de los mismos. Con ello se consigue unos excepcionales resultados oncológicos, mejorar notablemente la calidad de vida de nuestros pacientes durante la terapia y conseguir normalizar el resto de aspectos de su propia vida.

Detrás de cada tratamiento existe un equipo humano altamente capacitado formado por médicos especialistas en Radioncología, enfermeros, radiofísicos, técnicos de radioterapia, administrativos, auxiliares, etc. Todos ellos realizan unas funciones muy específicas y coordinadas sin las cuales sería imposible conseguir unos resultados adecuados. La implicación y compromiso de cada uno de los miembros del equipo es esencial.

Una parte aún «poco amigable” de la actividad radioterápica es que las unidades se suelen encontrar en áreas hospitalarias muy concretas como son los sótanos por el diseño de las mismas. La mayoría de estos espacios carecen de ventanas, luz natural y mobiliario adecuado para la estancia de los pacientes. Esta situación es necesaria hasta cierto punto.

Esta ubicación se concibe con la idea de proteger a otras personas en el exterior de la radiación que emana de los equipos.

Por suerte cada vez más se están llevando a cabo iniciativas de “humanización” de espacios, porque somos conocedores de que las necesidades de nuestros pacientes van más allá de la correcta administración de la Radioterapia. Queremos crear un ambiente acogedor, relajante que permita llevar lo mejor posible el paso por nuestro tratamientos.

Finalmente, poner en valor el papel crucial de la Radioterapia en el tratamiento de los diferentes tipos de tumores. Una terapia altamente curativa, presente y accesible en la mayoría de los centros sanitarios de nuestro entorno, con equipamientos de precisión y vanguardia siendo unos de los pilares en la lucha contra el cáncer en la actualidad con un futuro cada vez más prometedor.

D. Pablo Enríquez Valens

Presidente Provincial de Alicante

Seguir por WhatsApp
😊 ¿Necesitas ayuda en algo?
Hola 👋 ¿Cómo estás?
🤗 Puedes hacernos cualquier consulta, compartir tu experiencia, o hacernos una sugerencia directamente 🤗.